El suministro y saneamiento de agua dulce es un aspecto vital para garantizar la sostenibilidad de las Ciudades Inteligentes (ONU-Agua, 2006). Este indicador, unido a otros factores esenciales como el acceso a la vivienda (nombrado en el primer inciso del art. 25 de la Declaración Universal de Derechos Humanos) y servicios básicos, permiten no solo promover el desarrollo de la zona urbana como un conjunto, sino también, de la calidad de vida de todos sus ciudadanos.
Urban basic services emphasis is placed on strengthening policies and institutional frameworks for expanding equitable access to urban basic services, especially for the poor. Policy and technical support is provided to partner countries and local authorities in the areas of water and sanitation, urban waste management, urban mobility and urban energy.
La rápida urbanización actual ejerce presión sobre la vivienda y el uso del suelo. Para el 2030, cerca de 3 billones de personas o el 40% de la población del mundo necesitarán tener acceso a viviendas, infraestructura básica y a otros servicios tales como sistemas de acueducto y saneamiento. Estas cifras pueden traducirse en la necesidad de construir 96.150 viviendas diarias en suelos con servicios y documentos a partir de este momento y hasta el 2030.
La mitad de la humanidad vive en la actualidad en ciudades y, dentro de dos décadas, casi el 60% de la población mundial habitará en núcleos urbanos. El crecimiento urbano es mayor en los países en desarrollo, donde las ciudades aumentan su población, de media, en 5 millones de habitantes al mes. La explosión del crecimiento urbano conlleva unos desafíos sin precedentes entre los que la falta de suministro de agua y saneamiento es el más urgente y lesivo.
Dos son los principales desafíos en materia de agua que afectan a la sostenibilidad de los asentamientos urbanos: la falta de acceso a agua saludable y a saneamiento y el aumento de desastres relacionados con el agua como inundaciones y sequías.