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Caja de Herramientas para la Integración de la Biodiversidad en la Planificación para el Desarrollo en América Latina y el Caribe


Acerca de la biodiversidad...



Consideraciones clave sobre la biodiversidad >>>




El concepto de biodiversidad o diversidad biológica se refiere a la enorme variedad de vida existente en la Tierra y engloba todos los niveles en que esa diversidad se expresa, se estructura y convive. Abarca desde la variedad y combinaciones de genes que hay en una misma población y la interacción que existe entre los individuos de esa población con su entorno físico y con otras especies y comunidades que conforman un ecosistema, hasta las interrelaciones espaciotemporales entre los ecosistemas a través de paisajes, especies migratorias y ciclos de nutrientes.




Por ejemplo, si pensamos en un bosque de montaña, hay especies y comunidades o ecosistemas distintos en los bordes de los ríos, en la cima y en la base de la montaña. Hay variaciones que pueden depender de la temporada del año, como algunas especies de aves que descienden a los valles durante el invierno y regresan a la parte alta de la montaña cuando las condiciones no son tan extremas. El flujo de nutrientes que baja por los ríos hasta llegar al mar es importante para muchas especies marinas comerciales que viven en la costa al menos una parte de su ciclo de vida.
 




El término “biodiversidad” (la contracción de “diversidad biológica”) surgió a mediados de la década de los ochenta, en foros que destacaban la preocupación de la rápida destrucción de los hábitats naturales y la pérdida especies (Núñez, González-Gaudiano y Barahona, 2003). El ser humano también es parte de la biodiversidad e influye desproporcionadamente en ella, pero en los últimos 300 años muchas de las actividades productivas y económicas de la humanidad han provocado fuertes impactos que la impactan alterando su capacidad de recuperarse.
 




La biodiversidad no reconoce fronteras. Está interconectada entre sus componentes (en procesos interdependientes) y es una base transversal del desarrollo cultural y socioeconómico. También es un patrimonio que habilita otros activos y, si mantiene en buen estado sus procesos funcionales, se regenera. En una analogía con el sistema financiero, reduce el riesgo y la incertidumbre y permite la estabilidad del sistema del que depende toda la humanidad (Dasgupta, 2021).

La especie humana ha habitado el planeta desde hace trescientos mil años, coexistiendo con otros seres vivos en distintos paisajes el 99,99% del tiempo de su existencia en el planeta Tierra. En este sentido, es lógico que estar en contacto con la biodiversidad o en entornos naturales brinde al ser humano una sensación invaluable de bienestar y aumente su salud (Bustamante, 2024).

La biodiversidad o la naturaleza brinda lo que conocemos como bienes y servicios ambientales o servicios ecosistémicos. No podríamos vivir sin los beneficios que la naturaleza provee, como la generación de oxígeno, la formación del suelo, el mejoramiento de la calidad del aire, la regulación del clima, la purificación del agua, la polinización de los cultivos, la disminución del riesgo de desastres como el oleaje que golpea la costa durante huracanes y tormentas y amortigua la entrada del viento en zonas costeras, la provisión de alimentos, de textiles, de material de construcción, de especies medicinales, entre otros. La biodiversidad también entrega servicios culturales, escénicos, religiosos, de identidad y de bienestar intangible para la salud humana, como el aumentar la sensación de paz y disminuir la soledad.

Sin embargo, por el hecho de que muchos procesos que mantienen (regeneran) a la biodiversidad son invisibles al ojo humano, por su complejidad, por la forma de vida moderna y fallas institucionales, el concepto y la dependencia que las sociedades y las economías tienen de la biodiversidad ha sido invisibilizado o subvalorado (Dasgupta, 2021). Reed Noss (1990) propuso una caracterización de la biodiversidad que reconoce componentes en distintos niveles de organización bajo tres grandes atributos interdependientes entre sí: estructura, composición y función.  

 


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Las contribuciones de la naturaleza a las personas...

 

Los ecosistemas llevan a cabo una amplia variedad de procesos esenciales con los que los seres vivos nos beneficiamos directa o indirectamente para vivir. El término "servicios ecosistémicos" refiere a procesos y funciones para satisfacer necesidades básicas, culturales y de bienestar de la humanidad que brinda la biodiversidad. Estos se clasifican (Evaluación de los Ecosistemas del Milenio, 2005) en cuatro grandes grupos: los servicios culturales (mayormente intangibles), los servicios de sostenimiento, de aprovisionamiento y de regulación.

 

Fuente: elaboración propia a partir de WWF, 2018 y de Sarukhán, J. et al. (2017) pág. 60.


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Para que los servicios ecosistémicos puedan mantenerse en el tiempo, la biodiversidad debe estar saludable, de esa forma tendrá la capacidad de amortiguar/adaptarse a las perturbaciones o condiciones cambiantes. La biodiversidad actual es producto de las interacciones biológicas producidas por cambios geológicos, biogeográficos, evolutivos y ecológicos, y por lo tanto, es esencialmente dinámica. En términos de conservación a largo plazo del patrimonio natural que la región posee, el objetivo es posibilitar la continuidad de los procesos evolutivos y ecológicos (Rozzi y otros, 2001).

 

 


Esta caja de herramientas fue desarrollada con el apoyo del proyecto Post-2020 Biodiversity Framework - EU Support, financiado por la Unión Europea y ejecutado por Expertise France. Su contenido es responsabilidad exclusiva del proyecto y no refleja necesariamente las opiniones de la Unión Europea o de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.

Año: 2023 / 2024